Amelia tiene 10 años, saca buenas notas, va a natación, a inglés, recoge su cuarto, hace sus deberes, y los sábados va a los torneos de ajedrez. ¿Quizás demasiadas tareas? y poco tiempo para soñar…
A Amelia le apasiona leer, sus libros de cuento son sus mejores amigos, y desde hace unos días, una flauta que encontró en el desván junto a las fotos de su abuelo que era músico. Nuestra historia nos sitúa en ese día, y en esa noche en la que Amelia descubre su pasión, la música.